Pondremos en valor un entorno, la Parte Vieja Donostiarra. El Barrio Original de nuestra cuidad; donde residen nuestras tradiciones, fiestas, celebraciones y esencias como ciudad y como ciudadanía. Vivimos en un monumento. Es hora de mostrarlo con orgullo. Y de cuidarlo.
Potenciaremos lo que nos hace únicos, reconocidos y conocidos; una forma de ser y de hacer en la elaboración y en el servicio. No servimos comida y bebida, servimos para generar experiencias positivas, momentos que se conviertan en recuerdos.
Reivindicaremos la tradición como visión de futuro. Porque ese legado es el tesoro que se traspasa y se renueva, dando como resultado nuevas propuestas. Eso es innovación: saber que lo de siempre, puede ser siempre diferente.
Pondremos la Parte Vieja a disposición de Donostia y los donostiarras, para Gipuzkoa y la ciudadanía gipuzcoana. Es un espacio abierto al mundo y al visitante sea cual sea su procedencia, pero es el lugar que nos vio nacer y crecer. Aquí tenemos nuestro sitio, por derecho.