Alde Zaharra es un lugar de encuentros y reencuentros. Un lugar para compartir tus mejores momentos en la barra de un bar o alrededor de una mesa. Un lugar para disfrutar de una amplia oferta gastronómica que recorre desde lo más tradicional hasta los nuevos platos. Encuentra tu sitio aquí y disfruta de una magnífica experiencia gastronómica.
Alde Zaharra es un lugar de encuentros y reencuentros. Un lugar para compartir tus mejores momentos en la barra de un bar o alrededor de una mesa. Un lugar para disfrutar de una amplia oferta gastronómica que recorre desde lo más tradicional hasta los nuevos platos. Encuentra tu sitio aquí y disfruta de una magnífica experiencia gastronómica.
Si por algo destaca el sector de la hostelería es por el agradecimiento y el cariño de la clientela. Y esa fue la razón por la que Aitor Oyarzabal volvió a la hostelería en el año 2017, tras una pausa de más de 30 años.
Oyarzabal viene de una familia de tres generaciones de carniceros que estaba en el mercado de La Bretxa. Saltó a la hostelería con 26 años y, tras una larga pausa en la que montó una empresa de reformas, decidió volver a la gastronomía. “Realmente, soy mucho más hostelero de lo que yo pensaba”, nos cuenta Oyarzabal, propietario del Bare-Bare.
Todo aquel que cruza Bare-Bare tiene el placer de probar el producto de calidad, tratado con amor y respeto. Se trata de hacer una apuesta por el propio sabor de la pieza: el lenguado, el besugo, el bogavante etc.“Realmente nos hemos especializado en el producto”, explica. Y es que estos son productos que se disfrutan con una buena brasa o parrilla; una apuesta por los sabores tradicionales de nuestra tierra acompañada, en ocasiones, por platos de otros países que una vez enamoraron a su dueño y hoy se dan a conocer a través del bar.
Y es que la hostelería ha sido para él, un amante de los viajes, una forma de descubrir: de viajar a través de platos, de explorar el sabor real, de encontrar nuevos productos maravillosos. Oyarzabal acoge en su casa con agradecimiento a toda persona que cruza sus puertas. Pero es el cliente el que acaba quedando fascinado con sus pescados, carnes y pintxos de primera calidad.
“¿Qué tiene la Parte Vieja? Lo tiene todo”, nos confiesa Oyarzabal. Experiencia, ambiente, gente local apasionada por la gastronomía y visitantes dispuestos a probar algo nuevo. La Parte Vieja atrae porque hay grandes profesionales como Aitor Oyarzabal, que apuestan por la oferta de calidad a buen precio y el saber hacer. Y es que en Bare-Bare lo tienen claro: el éxito se alcanza trabajando lo mejor posible todos los días.
Así, han visitado su restaurante personajes directores de cine como Woody Allen o Bong Joon-ho, director de la cinta galardonada a Mejor Película en los Óscar de 2020. Pero para Oyarzabal, todos sus clientes son estrellas, así lo señala: “Todo el que viene aporta algo”, y esa es, sin duda, la receta del éxito de Bare-Bare.
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